Antes de que Oskorri se estrenara como banda, algunos de sus miembros ya tenían una estrecha relación con el escritor y poeta vasco Gabriel Aresti, con quien se reunían habitualmente para compartir ideas y proyectos.
La profunda influencia de Aresti en Oskorri se dejó notar en sus letras y sus canciones y también en las líneas de trabajo que el grupo desarrollaría en el futuro.
El 25 de marzo de 1.971 Oskorri debutó en el Paraninfo de la Universidad de Deusto (sorprendentemente, hace poco, un aficionado ha reencontrado la grabación de aquel primer concierto) fundamentalmente con un repertorio de canciones inspiradas en la obra del poeta, pero ya incluyendo además piezas de otros poetas contemporáneos, de clásicos como Bernat Etxepare (sutilmente aggiornado por Aresti), así como temas escritos por los propios
Oskorrianos, alguna canción tradicional y algún viejo bertsolari que el propio Gabriel Aresti les había descubierto.
Así comenzó la andadura del grupo que, durante años, siguió trabajando con Aresti componiendo mano a mano nuevas canciones, hasta la muerte de Gabriel en 1.975.
Tras la desaparición del poeta, el grupo fue editando las canciones que se habían compuesto. Así, a medida que las circunstancias y la censura lo fueron permitiendo, se publicaron algunos temas como los singles editados a finales del 75 y mediados del 76 o el L.P “Gabriel Arestiren oroimenez” a finales del 76. En 1977 el grupo graba y presenta “Mosen Bernat Etxepare, 1545” y en 1979 el doble LP “Oskorri”, donde aparecen muchos temas del poeta. Las últimas canciones sin editar, que habían estado hasta entonces retenidas por el censor, aparecen en el trabajo de 1981 “… eta Oskorri sortu zen” de Natxo de Felipe.
Más de 30 años después, Oskorri vuelve a los orígenes y recupera todo ese repertorio compuesto, inspirado o remodelado por Gabriel Aresti. En pleno 2013, sin ninguna especial nostalgia, resulta oportuno repasar aquel viejo repertorio. Por una parte, porque, sinceramente, nadie podrá poner en entredicho la emoción y autenticidad de esas canciones surgidas de las tripas y, por otra y quizás más importante parte, porque resulta asombrosa su increíble actualidad en la bárbara situación que nos atrapa.
Un nuevo proyecto que presenta al grupo con un aire más clásico y acústico que nunca. Para muchos serán recuerdos de juventud y para los más jóvenes será una oportunidad para conocer de cerca y sentir al poeta vasco por excelencia.
De esta celebración, “Gabriel Aresti bizitan”, en la que tendremos bien vivo a Gabriel
Aresti de visita, saldremos, seguro, algo más vivificados.