La delegada de Cooperación al Desarrollo y Derechos Humanos Mónica Martínez y la representante de Tadamum, Trini Fernández han presentado este lunes las iniciativas que van a tener lugar en la ciudad, dentro de la XV edición de la Caravana Vasca con el Sáhara.
Mónica Martínez destacaba “el significado que tiene un programa de recogida como es la caravana de alimentos, en el sentido de poder hacer paliar todo lo posible unas necesidades de primer orden en estos campamentos que sufren situaciones de carencia alimentaria. Son varios los años en los que colaboramos con esta iniciativa que va en la dirección de poder completar ese aporte alimentario que necesitan».
Se cumplen así 15 ediciones desde que se puso en marcha la Caravana Vasca con el Sáhara, Alimenta una esperanza», demandado por la Media Luna Saharaui y la Unión Nacional de Mujeres Saharauis (UNMS) dentro de la política de coordinación entre diferentes colectivos de solidaridad con el Pueblo Saharaui con el objetivo de recoger alimentos para la población refugiada de los campamentos saharauis en Tindouf (Argelia) y disminuir las patologías por desnutrición de la población refugiada más vulnerable.
Dada la situación de refugio y las especiales circunstancias de la zona, la subsistencia en los campamentos de refugiados y refugiadas saharauis en Tindouf (Argelia) depende prácticamente en su totalidad de la ayuda exterior. En el caso de la alimentación, desde 1975 diversos organismos internacionales, entre los que destacan el ACNUR, la Unión Europea, ECHO y el PAM, se han encargado de proporcionar alimentos a la población refugiada, mediante el envío de legumbres, harina, leche en polvo, conservas, etc. Sin embargo, debido a diversas circunstancias, estos alimentos no siempre pueden llegar a los campamentos ni con la regularidad ni en la cantidad deseada, dándose situaciones de carencia y retraso importantes.
Como ya ha indicado la Media Luna Roja Saharaui, el hecho de que no esté garantizada la seguridad alimentaria de la población refugiada saharaui tiene consecuencias graves sobre la calidad de vida de la población, especialmente sobre su salud, aumentando la prevalencia de patologías por desnutrición y disminuyendo la capacidad de respuesta a otras enfermedades.
Asimismo, por parte de la Unión Nacional de Mujeres Saharauis, se insiste en la necesidad del envío de compresas como producto higiénico básico e indispensable para las mujeres. La dificultad de obtención de este tipo de productos en los campamentos hace que su recogida y envío sea absolutamente pertinente.