Con el objetivo seguir los movimientos y migraciones del vencejo común, la organización SEO/Birdlife va a proceder, con la colaboración del Ayuntamiento de Irun, al marcaje con geolocalizadores de 20 aves de esta especie en el barrio de Santiago, en una de las paredes traseras del frontón situado cerca de la plaza Erromes.
Durante la mañana de este jueves 9 de julio se van a colocar a cada animal un geolocalizador en la espalda que registrará la información necesaria para desvelar su migración y, en caso de que el año que viene sean recapturados, poder saber dónde han viajado.
Los vencejos comunes son una de las aves más representativas de nuestros pueblos y ciudades en primavera. Es un animal de pequeñas dimensiones (40 gramos de peso) que cada año, a partir de la primavera aparece en los cielos de esta zona en grupos de miles de ejemplares con sus característicos chillidos. A finales de julio comienzan a abandonar sus nidos para marcharse hacia África.
En 2012 SEO/BirdLife comenzó a marcar vencejos con el fin de poder averiguar dónde pasan los inviernos. Este ave, eminentemente voladora y que solo se posa para criar, a pesar de ser tan común en nuestras latitudes, aún esconde muchos detalles sobre sus viajes migratorios y sus zonas de invernada.
Los aparatos de seguimiento remoto de tan solo 0,6 gramos de peso que colocarán este jueves registran el nivel de luz en el lugar donde se encuentran, y mediante complicadas fórmulas astronómicas son capaces de proporcionar las coordenadas del lugar en donde se encuentra el ave en cada momento. Con esta medida se espera tener más información a la que se dispone de estudios anteriores y que permita así desvelar los viajes de estas aves, sobre todo cuando llega el invierno.
Esta especie, junto con otras aves muy comunes en nuestras aglomeraciones humanas como son los aviones comunes y las golondrinas, son especies en franco declive por causas como la degradación de sus hábitats, el uso masivo de pesticidas, la dificultad para anidar etc., explican desde SEO/BIrdlife, quienes a su vez señalan que la única forma que para poder ayudar en la conservación de estas poblaciones pasa por ahondar en el conocimiento sobre sus necesidades vitales y los itinerarios migratorios.